Multan a coahuilense por castración de ‘oso sociable’
Saltillo, COAH.- Por la castración del «oso sociable» u «Oso 34», la Profepa sancionó a siete involucrados con multas que, en suma, alcanzan los 2.2 millones de pesos.
En el fallo, la dependencia federal determinó la responsabilidad tanto de personal de la UANL, de Parques y Vida Silvestre y de la misma Profepa.
Según la resolución, dictada el pasado 16 de febrero, se estableció que no era necesario el procedimiento de castración —conocido como orquiectomía— lo que resultó en una actuación contra una especie en peligro de extinción.
Los sancionados son Martín Vargas Prieto, director de Inspección y Vigilancia de Vida Silvestre de la Subprocuraduría de Recursos Naturales de la Profepa; Rogelio Carrera Treviño, coordinador del laboratorio de Fauna Silvestre de la Facultad de Veterinaria de la UANL; Ricardo Vladimir Barajas Juárez, veterinario que ejecutó la orquiectomía, y Jorge Luis Guerrero Salcedo, director de Recursos Forestales de la Secretaría del Medio Ambiente de Coahuila.
Además recibieron sanciones Lindolfo Gutiérrez Olvera y Saúl Sánchez, inspectores de la Profepa, así como Daniel Martín López Rico, asistente de Barajas Juárez.
La dependencia Parques y Vida Silvestre también recibió una multa.
Las sanciones económicas varían según la persona, pero van desde los 499 mil hasta los 21 mil pesos.
«No era necesario realizar el procedimiento de orquiectomía tal y como lo avaló el C. Ricardo Vladimir Barajas, pues entre varios aspectos técnicos, con la castración realizada al ejemplar de oso negro marcado con el arete azul número 34, en la época reproductiva no presentaría un comportamiento de búsqueda de pareja», señala el resolutivo.
La indagatoria concluyó que los involucrados debieron esperar una autorización de la Semarnat para la castración y para el posterior traslado del «oso sociable».
El 5 de agosto del 2020, autoridades capturaron al oso negro que se hizo viral al ser captado en una selfie por una paseante de Chipinque.
El ejemplar, de 94.8 kilos, fue trasladado a la Facultad de Veterinaria, donde lo castraron y lo trasladaron a Chihuahua.
Los sancionados fueron inscritos en el padrón de infractores de la Profepa, lo que les impediría tener permiso para trabajar con fauna silvestre.