Rechazo de acreedores deja a Altos Hornos de México al borde de la quiebra
Monclova, COAH. — Los acreedores de Altos Hornos de México (AHMSA) han rechazado la propuesta de la empresa de condonar entre el 96% y el 97% de sus deudas y pagar el resto en un plazo de 17 años, lo que ha resultado inaceptable para la mayoría. Esto mantiene a AHMSA en una situación de quiebra técnica, y se espera que la quiebra jurídica se declare el próximo 4 de agosto, fecha en que vence la prórroga para llegar a un acuerdo.
“Fue retirada en virtud de que la mayor parte de los acreedores, tratándose de un concurso mercantil en concreto con Altos Hornos, consideran absurda y ridícula la propuesta de la empresa de que le condonen entre un 96 y un 97 por ciento de la deuda y el resto pagadero en cerca de 17 años”, explicó el abogado Fernando Rodríguez González, diputado local suplente (PT) y quien ha apoyado a los trabajadores afectados.
Rodríguez González también cuestionó la verdadera identidad de los nuevos propietarios de AHMSA, insinuando que Alonso Ancira podría estar detrás de ellos. “Debemos dejar claro si efectivamente los supuestos nuevos propietarios no tienen ninguna relación con Alonso Ancira; todo hace parecer que es el mismo Alonso el que está detrás de esto”, afirmó.
La propuesta de reestructura fue retirada porque no alcanzó el apoyo necesario entre los acreedores. “No alcanzó el 50 por ciento más uno, puesto que los mismos empresarios lo consideraron ridículo y ellos manifiestan que Alonso Ancira está detrás de los supuestos nuevos inversionistas”, señaló Rodríguez González.
En este contexto, el legislador instó al Gobierno Federal a intervenir para salvar la empresa. “Lo único que procedería aquí es que el Gobierno Federal, a través del presidente Andrés Manuel López Obrador, creara una estrategia de salida que puede ser a través de un fideicomiso, en una administración tripartita entre particulares, el Gobierno de Coahuila y el Federal para que no se haga un mal uso”, sugirió.
Rodríguez González enfatizó la necesidad de proteger a los trabajadores y a sus familias, quienes enfrentan graves problemas económicos debido a la situación de la empresa. “Darle dinero a Ancira es darlo a un pozo sin fondo, aquí más allá de un problema de particulares está un grave problema social donde hay deserción, las familias no tienen qué comer, a los trabajadores poco les importan las campañas políticas, lo que les interesa es reactivar su fuente de empleo”, concluyó.
La situación de AHMSA sigue siendo crítica, y la intervención del gobierno se considera vital para evitar un impacto social y económico mayor en la región.
