Tony Flores propone iniciativa para combatir el desperdicio de alimentos y apoyar a personas en situación de calle
Saltillo, COAH. – El diputado del Partido del Trabajo, Antonio Flores Guerra, presentó una iniciativa ante el Congreso de Coahuila para adicionar una fracción al artículo 23 de la Ley para el Aprovechamiento Integral de Alimentos y su Donación Altruista del Estado de Coahuila de Zaragoza. La propuesta busca facultar a los municipios para diseñar y ejecutar políticas públicas que prevengan el desperdicio de alimentos y promuevan su distribución a personas en situación de carencia alimentaria, con especial prioridad para quienes viven en la calle y en abandono social.
Flores Guerra resaltó la importancia de implementar medidas que garanticen la igualdad y equidad en el acceso a recursos básicos, como lo establece el artículo 4 de la Constitución mexicana. «Es un derecho humano inherente que no debe verse afectado por situaciones de vulnerabilidad como la pobreza extrema, la salud mental o el abandono», señaló el legislador. Agregó que, aunque el gobierno ha avanzado en la creación de programas de apoyo, es urgente dirigir estos esfuerzos hacia grupos vulnerables que enfrentan la exclusión social.
La iniciativa también responde a los objetivos de la Agenda 2030 de la ONU, específicamente en temas como la reducción de la pobreza y la seguridad alimentaria. Según datos citados por el diputado, en México se desperdician cerca de mil millones de comidas anualmente, mientras que miles de personas carecen de acceso a una alimentación adecuada. En Coahuila, la situación es alarmante, con un creciente número de personas viviendo en las calles, especialmente en municipios con alta densidad poblacional.
De ser aprobada, esta reforma permitiría que los municipios coahuilenses implementen programas para prevenir el desperdicio y facilitar la donación de alimentos en buen estado a personas en situación de calle. La fracción IV del artículo 23 de la ley propuesta por Flores Guerra establece que los municipios deberán «diseñar, ejecutar y evaluar programas y políticas públicas que fomenten la distribución de alimentos entre quienes padecen carencia alimentaria».
El legislador destacó que esta medida no solo contribuiría a reducir el desperdicio, sino que también representa un acto de justicia social y solidaridad con las personas que viven en condiciones de vulnerabilidad extrema.